Propulsarte sin daño

Autopropulsión 

Una de las prioridades cuando un usuario empieza a utilizar una silla de rueda manual es el cuidado de una buena propulsión para que la articulación de los hombros sufra lo menos posible.

Entendemos como “autopropulsión” al movimiento que se realiza para impulsarse y poderse desplazar en una silla de ruedas. Se produce en una cadena cinética abierta y en ella participan las articulaciones del hombro, codo y muñeca.

Riesgos

La participación de estas articulaciones de forma exhaustiva y no realizarla con una buena higiene postural conlleva exponerlas a un posible daño o desgaste y la posible aparición a medio plazo de determinadas lesiones como tendinitis, bursitis, difusión de manguitos de los rotadores o capsulitis.

Según diferentes estudios se ha llegado a la conclusión que el 75% sufría dolor de hombros, el 16%  de codos, el 13% en muñecas y un 11% en manos.

¿Cómo realizar la autopropulsión?

Realizar una correcta autopropulsión ayudará al usuario a evitar molestias y las posibles lesiones derivadas del uso exahustivo de las articulaciones.

Para ello, os recomendamos realizarla de la forma más correcta posible:

• El recorrido ideal es el iniciado por detrás del tronco hasta terminar a la altura de los hombros.
• Que empiece en 30º en flexión y termine 30º en extensión.
• Propulsión semicircular.
• Brazadas largas y delicadas que disminuyan la fuerza y carga del empuje.
• Dejar que la mano efectúe un movimiento natural hacia abajo al soltar el aro de empuje, sin movimientos bruscos.

Desde el punto de vista fisioterapeuta es aconsejable realizar antes de cada sesión de propulsión un “calentamiento” inicial de las distintas articulaciones partícipes y después de realizar el trabajo practicar una serie de estiramientos. De esta forma disminuiremos las posibilidades de sufrir una lesión.

Nuestro compromiso

Desde ORTOPEDIA MONTESINOS concienciamos a nuestros clientes para que cuiden estos movimientos tan repetitivos y a tener en cuenta para evitar dolores derivados y posibles lesiones que pueden llegar a volverse crónicas.